¿Es bella la arruga? La pregunta del millón. Para nosotras, no. Son bellos los rostros. Y esta afirmación rotunda tiene matices: tampoco somos partidarias de rostros esculpidos artificialmente, que pierden toda su frescura e identidad. Por eso, somos abanderadas de la tecnología cosmética, porque es una alternativa saludable a los rellenos, el bótox, cirugías como la blefaroplastia y otros tratamientos invasivos que generalmente funcionan muy bien, pero tienen otra complejidad.
Y es que las arrugas, sean del tipo que sean, pueden mejorar y mucho con buena tecnología cosmética. Como siempre os decimos, para vencer al enemigo hay que conocerlo. Así que, vamos a hacer un repaso entre los tipos de arrugas faciales más frecuentes.
1. Arrugas de la cara: Líneas de Expresión
Las líneas de expresión son las arrugas finas que se forman alrededor de los ojos y la boca. En esta denominación incluimos dos, las más típicas, las odiosamente llamadas patas de gallo y código de barras. Estas arrugas se producen debido a la repetida contracción muscular a lo largo del tiempo. El legado de tu propia existencia, las risas, los llantos, las sorpresas y el dolor. Todo deja huella.
Los músculos faciales que más contribuyen a las líneas de expresión son los que controlan el parpadeo y los movimientos de la boca. Para tratar estas arrugas, nosotras os recomendamos dos dispositivos top:
Nuestro pequeño guerrero Fixeye. Es un masajeador de contorno de ojos y labios, que combina 4 tecnologías y contribuye a minimizar estas pequeñas marcas, elevar los párpados caídos y desinflamar el rostro en general.
Una buena máscara LED, como nuestra Silicone LED Mask, con luz roja e infrarroja (esta última es muy eficiente en el tratamiento de líneas de expresión) y que sea potente -no todas lo son-. Es un tratamiento no invasivo, que puede ser utilizado por todo tipo de pieles y que te deja la piel jugosa y radiante a las pocas semanas de uso. Cómo nos gusta la luz LED.
2. Arrugas de la cara: Surco Nasogeniano
El surco nasogeniano, comúnmente conocido como «líneas de la risa», se extiende desde los lados de la nariz hasta la comisura de la boca. Estas arrugas suelen profundizarse con el tiempo debido a la pérdida de colágeno y elastina. La piel pierde su elasticidad, resistencia y capacidad para mantener su forma original.
Son de esas arrugas que o te tocan o no, porque tienen un importante factor constitucional. Hay rostros que las tienen marcadas desde jóvenes. Como punto positivo es que se asocian mucho a la risa, así que, si tú eres una de esas personas, piensa que probablemente te has reído mucho.
La radiofrecuencia es una opción estupenda para suavizarlo. No desaparecerá, pero el estímulo intenso que esta tecnología hace en la producción de colágeno y elastina contribuye a elevar los tejidos faciales responsables de su aparición. Cada sesión con TriPollar Desire dura 12 minutos, tratas todo el rostro incluido el cuello (excepto la zona de la tráquea), desde tu cuarto de baño e incluso tu sofá. Tú escoges.
3. Arrugas de la cara: Líneas de marioneta
Las líneas de marioneta son pliegues que se forman desde las comisuras de la boca hacia abajo, creando una apariencia real de la típica marioneta clásica. Estas arrugas suelen ser causadas por la pérdida de volumen en las mejillas y la gravedad, como consecuencia de la flacidez y el descenso de los tejidos del tercio inferior de la cara. La flacidez nos persigue, amigas. Para ellas, os recomendamos igualmente la radiofrecuencia facial, para calentar las fibras de la piel, remodelar el colágeno existente y fomentar la generación de colágeno nuevo.
No olvidéis utilizar vuestros dispositivos de radiofrecuencia siempre, siempre, con un gel conductor de buena calidad y que realmente esté formulado para los dispositivos de radiofrecuencia. Jamás uséis crema hidratante u otro producto, porque vais a dañar el aparato y, lo que es peor, las arrugas seguirán ahí, impertérritas.
4. Arrugas de la cara: Arruga del Entrecejo
La arruga del entrecejo, también conocida como «línea del ceño fruncido», se forma en la frente debido a la contracción repetida de los músculos en esa área. Es una arruga especialmente odiosa, porque nos da apariencia de enfado o contrariedad. Nadie nos convencerá de que esta es una arruga bella. Todo lo contrario.
Masajear diariamente esta arruga con la ayuda de Fixeye la minimiza muchísimo, incluso puede hacer que en reposo desaparezca, sobre todo combinado con radiofrecuencia y un buen sérum, como este.
5. Arrugas de la cara: anillos de Venus en el cuello
Ese gran olvidado. El actor secundario que nos acompaña y al que no hacemos el caso que deberíamos, hasta que nos damos cuenta de que él también envejece y nos necesita. Suele hacerlo antes que la cara, porque su piel es más fina, y, por tanto, acusa más la pérdida de colágeno. Tampoco ayuda mirar con frecuencia hacia abajo los dispositivos tecnológicos o una protección inadecuada frente a los factores de estrés externos, como el sol, el frío. Lo cuidamos menos y él se rebela.
Para el cuello os recomendamos nuestra máscara LED, en la que incluimos un accesorio específico para él, que abarca hasta la zona del escote. La luz LED no es invasiva ni dañina, por eso, puedes usarla en todo el cuello. Esto no sucede con la radiofrecuencia, que debe evitar la zona de la tráquea. Combinar ambas tecnologías es de sabias.
Conclusión: podemos y debemos cuidarnos el rostro, idealmente cuándo y dónde nos apetezca, y por el camino, disfrutar haciéndolo. La decisión de lanzarte a un tratamiento invasivo es tuya, y nada más que tuya, pero está bien que conozcas que hay alternativas reales y que funcionan.
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