Hablemos de verano y de manchas de la piel

Alguien tenía que empezar a hablar de verano y de manchas en la piel, aunque no nos guste esa asociación. Y, de paso, además de daros info útil y soluciones innovadoras, desmontaremos algunos mitos. En el equipo SKINVITY los mitos solo nos gustan en el cine o en el papel couché.

¿Qué es el melasma?

El melasma es una condición cutánea en la que se desarrollan manchas marrones en la piel, principalmente en la cara. Aunque puede parecer que la causa de estas manchas es hormonal, los estudios afirman que el desencadenante principal es la exposición al sol.

A veces se le llama «máscara o paño del embarazo» porque suele aparecer en esta etapa, tan maravillosa como intensita. 

El melasma se clasifica en tres tipos:

Epidérmico (afecta la capa más externa de la piel). La hiperpigmentación es marrón, con bordes bien definidos. 

Dérmico (afecta la capa media de la piel). Aparecen zonas azules grisáceas.

Mixto (afecta tanto la capa externa como la media de la piel). Tienen un pigmento entre marrón y gris. 

El melasma amigas, no se trata solo en invierno. Mito desmontado. Hay que cuidarlo durante todo el año. Como ahora estamos adentrándonos en período estival, os vamos a dar unas cuantas claves:

Si vas a estar al sol cual cangrejo… no hace falta que suspendas tu tratamiento, pero sí adaptarlo. ¿Cómo? Incrementando las medidas de fotoprotección: tópica, oral, y con todo tipo de outfits estupendos que nos protegan: pamelas, gafas de sol, amén de buscar la sombra de vez en cuando. Las sombrillas son imprescindibles en la playa y el chiringuito también es un buen refugio.

Si usas cremas específicas, se recomienda reducir los activos despigmentantes, tipo retinol, vitamina C, arbutina, ácido azelaico o ácido tranexámico. Y mejor evitar la hidroquinona.

Como complementos orales, puedes iniciar un tratamiento con ácido tranexámico oral (ve al médico que te asesore, no hagas experimentos).

Iniciar suplementos orales de acción despigmentante.

¿Qué son los léntigos solares o seniles?

Son manchas oscuras y planas de color uniforme con un diámetro no mayor de 1 cm. También se les conoce como «manchas de la edad» o «manchas del sol». Son signos de fotoenvejecimiento y están provocadas por la exposición prolongada al sol. Todas las mujeres de más de 30 o 40 años, que crecimos sin SPF 50 ni en la infancia ni en la adolescencia, somos candidatas a padecerlos. Recordemos que la piel tiene memoria y se acuerda de esas sesiones infinitas al sol con bien de aceite sin factor.

Pueden aparecer en cualquier parte, pero tienen predilección por la cara, los hombros, el escote y los antebrazos.

 Les va fenomenal la luz LED para atenuarlas, se quitan con láser o luz pulsada. No son peligrosos ni deben alarmarte. La cosmética, al contrario que en el melasma, solo tiene un efecto aclarante.

Los léntigos solares pueden tener un color claro u oscuro, pero es uniforme. Si la forma es irregular, crece y tienen varias tonalidades en su interior, es mejor que consultes a un dermatólogo.

Nosotras os recomendamos nuestra máscara, Silicone LED Mask de SKINVITY, para tratar las manchas. Está comprobado que la luz LED proporciona una oxigenación de las células que impacta en el tono de la piel y en su apariencia. No como un remedio que les hará desaparecer, pero sí mejora mucho su aspecto y las atenúa. Además, actúa sobre líneas de expresión y arrugas, estimulando la producción de colágeno. Tiene sesiones de 10 a 30 minutos, y te permite realizar otras tareas mientras la usas. Y, por supuesto, tú escoges cuándo y dónde crear tu rutina.